domingo, 30 de noviembre de 2008

CHILL OUT QUEEN



¡Ah, claro! Para algunos lo Chill Out resulta muy desesperante, para otros resulta cursi, y para prácticamente todos es aburrido; sí, acepto que todos esos adjetivos y otros más le han puesto a todo lo que suene Chill Out; pero hay quienes disfrutamos de un momento desconectados del mundanal ruido y que a pesar de tanto escándalo musical todavía creemos en propuestas musicales que nos llevan a un estado de éxtasis, barato, tal vez, pero que nos deja un buen sabor de boca luego de haber escuchado un poco de notas bajas y composiciones que nos llevan solamente a sentir por un momento que la vida es sencilla.

El caso de este CD podría parecer a muchos algo bastante desagradable; ya se realizaron tres o cuatro discos Chill Ou con música de los Beatles, otros con ópera, unos más con Bossa Nova, todo va bien; pero ¿con música de Queen? Y a los productores les pareció buena idea y sin decir “agua va” lanzaron esta producción. Sé que es algo que a muchos les disgustará, pero hay que oír algunas de las propuestas y arreglos y nos daremos cuenta de que sí, algunas piezas están bien realizadas.

“A Chill Out tribute to Queen” es un CD para quienes, primeramente, conozcan la obra de Queen, luego que disfruten de la música Chill Out, si no es así, puede pasar desapercibido y olvidado, no hay problema. Pero dejando prejuicios aparte, la versión de Crazy Little Thing Call Love, Another Bites the dust y la creación de Love of my life son dignas de ser escuchadas. Por supuesto, es música Lounge, y por tanto se necesita cierto carácter dispuesto a dejarse llevar por un mundo que suena a caramelo, chocolate Lindt, vino tinto y sillones vanguardistas y vida Snob, lo sé, el Chill Out es así. Y escuchar a Queen en versión Lounge parece algo irreverente, pero escuchen primero y luego comenten.

El CD es producción de EMI music España, producción de Sergi Pérez Berk, año 2007 y para México 2008; si han seguido la serie de discos de Chill Out sabrán que las voces y los músicos son los mismos. Doce piezas conforman el disco, y son notables las canciones que menciono arriba, tal vez algunas resulten poco satisfactorias, mucho más conociendo las versiones originales de Queen; Bohemian Rhapsody la verdad no está bien interpretada, tampoco We are the champions, pero las demás tienen peculiaridades de arreglo que son dignas de ser escuchadas.

Un CD para goce sencillo sin pretensión, un CD para oídos que buscan nuevas interpretaciones de clásicos del rock y un disco que va dedicado a los que adoran todo lo Lounge.


IRAM de la Rochefoucault

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